Arquitectura Bioclimatica
El
aire interior de una
vivienda, por razones de salubridad y confort, debe renovarse en forma continua, exigiendo un
renovación total del aire por hora.
Pero en invierno cuando las las puertas y ventanas están cerradas, la
renovación del aire se produce por infiltración en las juntas de la carpintería, y por la ventilación natural a través de orificios y rejillas, si no tenemos nuestras
casas aislada .
Este aire que ingresa en nuestras
viviendas se encuentra a una temperatura exterior la que denominaremos
" te" inferior a la temperatura interior
" ti" provocando las molestias que origina el aire frío y genera una caída en la temperatura interior que debe ser restituida mediante de calefacción.
Así que nuestro
consumo de energía se incrementa : la cantidad necesaria de calor para elevar en 1ºC la temperatura de un volumen unitario de aire, el cual llamaremos
" Calor Especifico del Aire" (Ce) y su valor es a 0,35 ( W/m3 ºC). Por lo tanto para una
vivienda con volumen "
Vr" de aire renovado por hora, el cual ingresa con una temperatura exterior
"te" y se la quiere elevar a la temperatura interior de confort
"ti", demandara un consumo energético en forma de calor:
Veamos la ecuación:
Q2= Ce. Vr . ( ti-te)
Siendo
Q2= perdida total de calor consumida en elevar la temperatura de un volumen de
Vr de aire desde un valor inicial "te" a un valor final
"ti" (W)
Ce=
Calor Especifico del Aire ( W/ m3 ºC)
Vr: Volumen de aire renovado (m3)
(
ti-te)= diferencia de temeperatura entre el aire interior y exterior (ºC)
Si bien la purificar el
aire obliga renovar el volumen interior de una
vivienda una vez por hora, todo aumento por sobre este valor significa consumir mayor cantidad de energía tal como se desprende de la ecuación expuesta. Por ello se deben evitar las entradas parasitarias de aire, pero debemos tender a una regulación manual o mecánica de los caudales de aire que ingresen por ventilación por salubridad.