Entiéndase por arquitectura Bioclimatica aquella que hace de ella un intercambio entre el clima exterior y el ambiente interior. Es aquella que nos permite integrar la forma, la materia y la energía en una sola respuesta arquitectónica.
En la arquitectura islámica nos muestran claros ejemplos de como intergra todos estos elementos. En esta cultura son pocas las ventanas dirigidas hacia el exterior y se hallan provistas muchas veces de elementos fijos o móviles. Estos dispositivos sirven para regular los flujos del aire y son dispositivos muy interesantes para poder aplicar en nuestros diseños bioclimaticos.
Un ejemplo de esos dispositivos son las celosías, una especie de enrejado de listones hábilmente trensados con pequeños orificios que permiten filtrar la radiación solar, a la vez que reciben una luz suficiente asegurando la vista a la vez que permiten la ventilación.
En algunos casos para mejorar la ventilación captada y la convección natural, suele complejizarse este dispositivo formando un cajón de celosías que ofrecen tres fachadas, aumentando así la superficie en contacto con el viento y agregándole un cántaro con agua para provocar el enfriamiento evaporativo para favorecer la ventilación interior y provocar una climatización por humedecimiento del aire, para mantener el confort de dentro de las viviendas.
Y siempre recordemos:
La primera receta de una buena ventilación reside en la disposición de las ventanas, unas respecto de otras, de acuerdo con los vientos dominantes y el principio de la convección natural ( el aire sube, " aspirando" así el aire fresco)